El Índice de Precios de Consumo (IPC) mantuvo su tasa interanual en el octavo mes del año en el 2,7%, gracias a que el comportamiento de los precios de los alimentos y de la electricidad compensaron el de los carburantes, según los datos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En consecuencia, la estabilidad del IPC interanual en agosto frena la escalada experimentada por la tasa de inflación durante los dos meses anteriores.
«Es la misma tasa que en julio y continúa la senda de convergencia al objetivo de inflación del Banco Central Europeo«, destacaron desde el Ministerio de Economía, Comercio y Empresa, dirigido por Carlos Cuerpo.
Coste de los alimentos
Por su parte, el IPC de los alimentos y bebidas no alcohólicas se situó en el 2,3%, cuatro décimas por debajo de la tasa de julio, por la bajada de la fruta.
«La estabilidad de la inflación y las subidas de los salarios están permitiendo a las familias recuperar de forma progresiva su poder adquisitivo», remarcó el Ministerio.
En términos mensuales (agosto sobre julio), el IPC no experimentó variación, en contraste con la caída del 0,1% registrada el mes anterior y con la que se rompieron nueve meses consecutivos de alzas mensuales.
Por último, la inflación subyacente se incrementó una décima en agosto, hasta el 2,4%, tres décimas por debajo del índice general.
Según el INE, la tasa interanual de la inflación a impuestos constantes se situó en agosto en el 2,2%, cinco décimas por debajo de la tasa general.
Por su parte, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) se situó en el 2,7%, la misma que la registrada el mes anterior. La variación mensual del IPCA fue del 0,0%.