La cadena murciana de restauración La Boca Te Lía, con sede en Alcantarilla, sigue conquistando los paladares de la Región con su propuesta de bocadillos originales y un ambiente desenfadado que atrae por igual a jóvenes, familias y amantes de la buena comida.
Fiel reflejo de su excelente momento, la célebre marca de bocadillos acaba de anunciar un nuevo y ambicioso plan de expansión que contempla la apertura de cuatro nuevos establecimientos para 2026 fuera de la Región. Con este crecimiento, la compañía espera alcanzar la cifra de 36 locales en un plazo de tres años, reforzando y consolidando así su presencia en el mercado nacional.
Hace apenas dos semanas, La Boca Te Lía abrió su último local hasta el momento en el centro comercial Los Olivos de Cieza. Con esta inauguración ya suma doce establecimientos propios, además de una franquicia en Cartagena y un local en Jaén.
Según confirma a este medio Adrián García, responsable de marketing de la compañía, la expansión no se quedará solo en la Región de Murcia: “Ya estamos estudiando nuevas localizaciones fuera de la comunidad, especialmente en Andalucía, que es la zona desde la que recibimos más visitas y más interés por parte de nuestros clientes. Queremos crecer de manera responsable y cercana”.
Apuesta por la sostenibilidad
La compañía alcantarillera no solo genera empleo —actualmente cuenta con 350 trabajadores, un 20% más que hace un año—, sino que también se preocupa por ofrecer una experiencia inclusiva. La cadena lanzó hace unos meses la primera marinera sin gluten certificada por la Asociación de Celíacos de Murcia (ACMU), a la que se suma una carta sin gluten con la mayor variedad de opciones para celiacos de la Región.
«La Boca Te Lía ha trabajado estrechamente con ACMU para certificar esta marinera sin gluten, así como nuestros bocadillos asegurando que cumple con los estándares más exigentes para evitar cualquier tipo de contaminación cruzada. Además, el equipo de cocina ha recibido formación específica para garantizar un servicio seguro y de calidad. Queremos que toda la experiencia para nuestros clientes celiacos sea totalmente segura», añade el responsable.
La cadena de bocadillos apuesta también por la sostenibilidad. Así, bajo la auditoría de Dcycle, está midiendo la huella de carbono de toda la cadena de operaciones de cada local a fin de reducir emisiones, gestionar residuos y optimizar el transporte, demostrando que la gastronomía también puede ser responsable con el medio ambiente.
Desde la cadena confirman que el nuevo local de Los Olivos en Cieza se ha convertido ya en un punto de encuentro en la Vega Alta, con bocadillos creativos servidos en mesa y un ambiente que invita a disfrutar de la comida en una experiencia donde cada detalle está pensado para sorprender al cliente. «La afluencia de público está siendo muy positiva, estamos llenando desde el primer día. Era una demanda de muchos de nuestros clientes que tenían que desplazarse a la capital para disfrutar de nuestra carta y finalmente la hemos podido hacer realidad», ha finalizado García.