La Consejería de Educación ha iniciado los trabajos de campo con los primeros sondeos para la ampliación del CEIP Antonio Molina de Blanca. El alcalde de Blanca, Á. Pablo Cano ha destacado que el proyecto supondrá una inversión total de 2,7 millones de euros.
En concreto, se está procediendo a la toma de datos y al levantamiento topográfico, tanto de la parcela del colegio como de la zonas de edificaciones que se van a derribar, con el fin de tener una visión global del proyecto que se va a ejecutar.
Estos trabajos se van a extender hasta finales de junio y forman parte de una primera fase que se inició con la inclusión en los presupuestos de la CARM para 2024 de una partida de 282.000 euros para el derribo del edificio y el inicio de la obra. Posteriormente, en la segunda fase, se procederá a la licitación de la obra completa.
En este sentido, el titular del Consistorio blanqueño ha expresado: “Este anuncio supone un nuevo paso para un proyecto muy esperado por todos los blanqueños, puesto que da respuesta a una demanda de todos los ciudadanos y de la comunidad educativa”.
En la actualidad, el colegio cuenta con dos aulas para Infantil y 13 para Primaria, además de seis aulas de menores dimensiones donde se ubican unidades por desdoble de otros grupos. Está previsto que este colegio se amplíe con la construcción de seis aulas de Educación Infantil, un comedor, un gimnasio y otras dependencias.
Obras de mejora y mantenimiento
A la apuesta del Ayuntamiento de Blanca por la rehabilitación y ampliación de este centro educativo, se suman otras actuaciones que se han llevado a cabo lo largo de las últimas semanas con el fin de mejorar sus instalaciones. En concreto, se ha procedido al saneamiento de las paredes exteriores deterioradas de ambos pabellones, así como su enlucimiento y su pintura interior y exterior.
Además, estos trabajos se suman a la sustitución de las ventanas de alguna clases con el fin de garantizar la seguridad de profesores y alumnos.