Más de una decena de países, entre ellos España, crearon en 2024 impuestos específicos a la banca o aumentaron los que ya tenían y que gravan específicamente a las entidades financieras, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
En su informe anual sobre reformas fiscales publicado este jueves que examina los cambios en 86 países y jurisdicciones, la OCDE destaca que por segundo año consecutivo en 2024 se ha constatado una inversión en la tendencia a la reducción del tipo que se aplica en el impuesto de sociedades (IS) que se venía constatando en las dos últimas décadas.
Eso queda ilustrado en que el pasado año hubo más países que incrementaron esos tipos del IS de los que los redujeron.
En concreto, entre los miembros de la OCDE se subió en la República Checa, Islandia, Eslovenia, Eslovaquia y Lituania, mientras descendió en Austria, Portugal y Luxemburgo.
Los autores del estudio puntualizan que pese a la subida del tipo que se aplica a las empresas por sus beneficios, los países siguen aprobando medidas que reducen la base impositiva del IS para dar un tratamiento preferencial a ciertos tipos de inversión, en particular en investigación y desarrollo (I+D), en tecnologías que reducen las emisiones contaminantes y en sectores estratégicos para la seguridad.
Sobre los gravámenes dirigidos específicamente a la banca, y que se añaden al IS, la OCDE cita los casos de Bélgica, Hungría, Irlanda, la Isla de Man, Israel, Mauricio, Países Bajos, Eslovaquia, España y Ucrania que los introdujeron o los ascendieron en 2024.
Impuesto a la banca del 50% en Ucrania
En el caso de Ucrania, el impuesto de sociedades que se aplica a las entidades financieras se ha fijado en el 25% con carácter permanente, y para el ejercicio fiscal de 2024 se estableció un tipo del 50% a los beneficios de los bancos, incluyendo los dividendos.
Israel impuso un impuesto adicional del 6 % a los grandes bancos desde abril de 2024 hasta finales de 2025.
Lituania ha establecido una contribución de solidaridad que deben pagar de mayo de 2023 a junio de 2025, mientras Eslovenia continúa aplicando un impuesto del 0,2% sobre el total de los activos de los bancos, con un límite del 30 % de su resultado operativo, para el periodo de 2024 a 2028.
El informe no entra a detallar el caso de España, donde el impuesto surgió en respuesta a la crisis energética por el estallido de la guerra de Ucrania en febrero de 2022, y aunque inicialmente debía limitarse a dos años, el Gobierno decidió prolongarlo con otra forma.
El peso del impuesto de sociedades en el total de la recaudación fiscal es muy variable en los países analizados pero sí que hay una tendencia clara y es que ha progresado desde comienzos de siglo.
El grupo de los llamados países de altos ingresos (entre los que está España) suponían el 11,2% del total de la recaudación en 2000 y el 13,3% en 2022.
España estaba por debajo de esa media, con un 7,22% en 2022 y en su caso eso era un porcentaje inferior al de 2000 (8,83%).
Noruega, el que más ingresó por impuesto de sociedades
El país de la OCDE para el que el IS representó una mayor cuota en 2022 fue Noruega, un 42,3%, y eso principalmente por los beneficios excepcionales en el sector de la energía, sabiendo que entre sus grandes empresas dominan las exportaciones de gas y de petróleo.
Por detrás de Noruega estaban Colombia (25,37%) y México (23,69%). Hay que tener en cuenta que el peso relativo del IS es muy elevado en los países latinoamericanos de la OCDE porque allí las cotizaciones sociales representan una proporción muy inferior que en los países europeos, donde la protección social está mucho más desarrollada.
Por lo que se refiere a los derechos de la propiedad, su peso relativo en la recaudación fiscal es también muy variable de unos países a otros, aunque tiene claramente más en los de altos ingresos (5,6% de media en 2022) que en los de bajos ingresos (menos del 1%).
España se situó en el 6,90%, por debajo del Reino Unido, Estados Unidos o Canadá, que superaron el 10%, también de Francia (8%) y de Colombia (7,8%), pero por encima de Italia (5,73%) o Alemania 2,81%).