El Grupo Cajamar obtuvo un resultado consolidado neto de 174,13 millones de euros en la primera mitad del año, un 191,7% más, casi el triple que los 59,7 millones de un año antes, gracias a la positiva evolución de los ingresos recurrentes del negocio bancario.
Además, el volumen de negocio gestionado ha superado los 100.000 millones de euros.
El entorno actual de tipos de interés contribuyó al crecimiento de los ingresos recurrentes e impulsó la cuenta de resultados con un incremento del margen de intereses del 30,9% en tasa interanual, hasta los 613,9 millones de euros.
El margen bruto, por su parte, creció un 30%, hasta los 788,9 millones de euros, impulsado por la fortaleza de los ingresos propios del negocio bancario y el rendimiento del crédito a la clientela, que mejora un 47,4%.
A su vez, el rendimiento del crédito mejoró un 47,4% y el margen de explotación se situó en 429 millones, un 48,8% más.
Los gastos de explotación aumentaron un 12,9%, tras el abono a la plantilla de los incentivos del año anterior. Tras ello, el resultado operativo se incrementó un 37,1%.
La rentabilidad sobre el capital, ROE en el argot financiero, se elevó 5,4 puntos porcentuales, hasta el 8,5% y la ratio de eficiencia se situó en el 45,6%, mejor que el 52,5% de un año antes.
Los recursos minoristas gestionados llegaron a los 54.660 millones, un 8,4% más, gracias al avance de un 19,5 % de los recursos fuera de balance, mientras que la inversión crediticia se incrementó un 0,4 %, hasta los 37.626 millones de euros.
La morosidad bajó 0,3 puntos porcentuales, hasta el 1,96%. En cuanto a solvencia, el aumento de los recursos propios computables contribuyó a que la ratio de máxima calidad, CET1 ‘fully loaded’, llegara al 13,8%.