La inflación de la zona euro se mantuvo estable en el octavo mes del año en una tasa interanual del 2%, impulsada por los servicios y los alimentos frescos, según los datos publicados este miércoles por Eurostat. Este es el objetivo a medio plazo del Banco Central Europeo (BCE).
Eurostat detalló que la inflación del sector servicios se situó en el 3,1%, una décima menos que en julio, mientras que los precios de los alimentos frescos se incrementaron un 5,5%, una décima más que en el mes anterior.
El precio de la energía retrocedió un 2,0% en agosto, una caída menor a la del 2,4% registrada en julio.
Por contra, el precio de los alimentos procesados, el alcohol y el tabaco descendió una décima, hasta el 2,6%, y el de los bienes industriales no energéticos se mantuvo estable en el 0,8%.
A su vez, la inflación subyacente bajó una décima en agosto hasta el 2,3%.
En la misma línea, el incremento de los precios en el conjunto de la Unión Europea en agosto se mantuvo también estable en el 2,4% en comparación con el mes anterior.
España, por su parte, registró en agosto una inflación superior a la media de la UE, en el 2,7%, pero sin cambios respecto al mes de julio.