El Ayuntamiento de Lorca ha lanzado la iniciativa “Lorca Avanza Contigo”, un proyecto impulsado por la reciente aprobación de la Ordenanza Municipal que regulará la circulación en el casco urbano de la ciudad. Esta medida, que busca mejorar la seguridad, la calidad del aire y la comodidad de residentes y visitantes, se implementará de manera gradual hasta su plena aplicación en enero de 2030. La normativa se centrará en la creación de zonas de bajas emisiones (ZBE) en dos áreas clave del centro histórico y en los alrededores de equipamientos educativos, deportivos y sanitarios.
La normativa establece que los vehículos sin etiqueta ambiental que no sean residentes en estas zonas no podrán acceder a ellas, a partir de la fecha de implementación efectiva, prevista para el año 2030. Sin embargo, la etapa de adaptación comenzará en enero de 2026, con una fase de señalización y comunicación para familiarizar a los ciudadanos con los nuevos cambios. Durante esta fase, no se aplicarán sanciones, y el objetivo principal será sensibilizar y educar a la población en torno a la importancia de la medida, que se enmarca dentro de las políticas europeas de sostenibilidad y reducción de emisiones.
La concejala de Urbanismo y Medioambiente, María Hernández, ha señalado que la medida es de gran relevancia para un municipio que enfrenta un déficit en la calidad del aire debido a episodios de intrusión de aire sahariano, que incrementan los niveles de partículas PM10 en el ambiente. «Es necesario un cambio en nuestros hábitos cotidianos», ha subrayado Hernández, añadiendo que el proyecto contribuirá a mejorar la calidad del aire y la sostenibilidad de la ciudad. Además, se prevé la implementación de 11 cámaras de control de accesos y 14 cámaras de monitoreo del tráfico, que proporcionarán datos en tiempo real sobre la circulación y permitirán gestionar de forma eficiente la movilidad en el centro urbano.
La iniciativa “Lorca Avanza Contigo” no tiene un carácter sancionador hasta el año 2030. El objetivo es fomentar una ciudad más verde y sostenible, sin penalizar a los ciudadanos en esta etapa de adaptación. Hernández destacó que el proyecto también contribuirá a dinamizar el comercio y la vida social del centro histórico, recuperando espacio público para el uso de las personas. Además, el uso compartido del coche privado, el transporte público, la bicicleta y los aparcamientos disuasorios serán clave para reducir los niveles de contaminación.
La medida cuenta con el respaldo de los fondos europeos NextGenerationEU, dentro del marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España. Además, se han realizado mesas participativas y reuniones con expertos y colectivos locales para garantizar que la normativa se ajuste a las necesidades del municipio.