Las patronales nacionales del comercio especializado de pan, carnes y productos pesqueros han considerado «positivo» el retraso de un año de la entrada en vigor del nuevo sistema digital de verificación de facturas Verifactu anunciado por el Gobierno.
Así lo han expresado en un comunicado conjunto la Confederación Española de Panadería, Pastelería, Bollería y Afines (Ceoppan), la Confederación Española de Detallistas de la Carne (Cedecarne) y la Federación Nacional de Asociaciones Provinciales de Empresarios Detallistas de Pescados y Productos Congelados (Fedepesca).
Las tres organizaciones habían solicitado una moratoria en la aplicación obligatoria de Verifactu para que sus establecimientos pudieran adaptarse sin riesgo para su viabilidad económica.
A la espera de conocer el texto del decreto que retrase la aplicación del nuevo sistema, los comerciantes minoristas han reiterado otras exigencias, como la exoneración específica para mayores de 60 años, flexibilidad para colectivos vulnerables y deducciones fiscales en el IRPF y en el impuesto de sociedades.
Asimismo, han reclamado un plan de choque que ayude a las empresas artesanas y tradicionales a realizar la transición hacia la facturación electrónica de manera «ordenada y realista», incluyendo apoyo económico, técnico y formativo.
«Nuestros sectores son mucho más que una actividad económica: son un elemento esencial para la cohesión social, la dinamización rural, urbana y de barrio y la calidad de vida de la ciudadanía. Por eso, su adaptación a Verifactu debe de hacerse de manera adecuada a su realidad», han apuntado las tres organizaciones.